La senadora explicó que la agenda ante Washington debe comenzar con una exigencia de descolonización proveedora de herramientas que superen las cinco o seis oficinas comerciales desperdigadas por el mundo que tiene el Estado Libre Asociado (ELA), sistema de gobierno instaurado en 1952 por Estados Unidos para evitar los informes a las Naciones Unidas.
La aspirante a gobernadora refirió que entre los beneficios de la independencia planteados por décadas por el PIP es que se abrirá la puerta a un mundo de posibilidades para el sector industrial.
Además se fortalecerán las exportaciones e importaciones mediante participación en foros internacionales como la Organización Mundial de Comercio, además de la Asociación de Estados del Caribe, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), entre otras entidades de la región.
La senadora boricua destacó que Puerto Rico estará en capacidad de suscribir acuerdos comerciales con otras naciones para lograr acceso preferencial a los mercados de Europa, América Latina y el Caribe, aparte de concertar tratados contributivos con el resto del mundo.
Santiago hizo hincapié también en el desarrollo de empresas propias de biotecnología para las que se cuenta con la infraestructura y un personal adiestrado, lo cual solo se puede alcanzar con los poderes soberanos. Información suministrada por la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina. Publicación cortesía de Vazcorp Corp.