miércoles, 12 de febrero de 2014
LAS CAUSAS DEL ÉXODO PUERTORRIQUEÑO
LAS CAUSAS DEL
ÉXODO PUERTORRIQUEÑO
Puerto Rico 12 de febrero de 2014. A continuación un Artículo escrito por
la periodista Lizatte Álvarez del New York Times. (Artículo editado y traducido)
El empresario y puertorriqueño Alexis Sotomayor tiene muchas razones para quedarse en Puerto Rico:
sus dos hijos; su madre y sus sesiones de chismes sobre platos de arroz frito;
y el bálsamo de la sal y sol que eleva su vida en la isla. Pero el negocio de
jabón artesanal que construyó el Sr. Sotomayor está apenas colgando en medio de
crecientes costos e impuestos, y las ventas bajaron en un 40 por ciento en cinco años. El crimen
rampante; recientemente, su novia fue casi asaltada a punta de pistola. Así que
el mes pasado abordó un vuelo a Orlando, Florida, para una entrevista de trabajo
en una destilería de ron con la esperanza de unirse al éxodo puertorriqueño
creciente. "Yo no veo a Puerto Rico mejorando," dijo el Sr.
Sotomayor, un ingeniero químico de 47 años de edad. "Yo veo a la isla cada vez peor. Es la
incertidumbre. ¿Qué voy a hacer, esperar
a que se ponga peor?"
La crisis económica de Puerto Rico aumentó con una nueva baja la semana
pasada cuando “Stándar & Poors y Moody's” degradaron los bonos de Puerto Rico a
chatarra y por otro lado una serie de medidas de austeridad adoptadas por el Nuevo
Gobernador Alejandro García Padilla, incluyendo el aumento de los impuestos y
el reequilibrio de las pensiones. Pero eso es sólo la última en un pronunciado
declive para crear temores sobre el futuro de Puerto Rico. En los últimos ocho
años debido a la mala administración,
Puerto Rico a logrado resultados negativos tales como $70 billones en
deuda, una tasa de desempleo del 15.4 por ciento, un alza del costo de vida, la
delincuencia generalizada, las escuelas desmenuzándose y un preocupante éxodo
de profesionales de la clase media puertorriqueña que se han trasladado a
lugares como Florida y Texas.
La situación ha crecido tan gravemente que esta isla tropical, conocida por
sus espectaculares playas, ambiente salsero e incentivos contributivos se ha
desvirtuado, ahora se menciona en el mismo aliento como Detroit, con una
diferencia significativa. Puerto Rico, un territorio de Estados Unidos de 3.6
millones de personas que algunas veces es tratado como un estado, no puede
declararse en quiebra debido a su condición política de colonia.
De abajo hacia arriba, los Puertorriqueños están percibiendo que se
desarrollan con una mezcla de incredulidad y estoicismo. El Gobernador Alejandro
García Padilla, quien fue electo gobernador de Puerto Rico por un estrecho margen en el 2012, dijo que después de su
victoria empezó a observar profundamente en el desastre económico y social de
la isla, sus instintos de lucha o huída al continente en alta velocidad. "Pensé
en pedir un recuento", dijo el Gobernador García Padilla, 42, con una
sonrisa durante una entrevista reciente en La Fortaleza, la residencia de
gobierno por 500 años, recordando, entre otras cosas, el déficit de $2.2
billones. "Pero ahora es demasiado tarde".
Según el Gobernador García Padilla: Existe una sensación de pesimismo en la isla. Las calles
están repletas de tiendas vacías en San Juan y en ciudades más pequeñas como
Mayagüez; las pequeñas empresas, duramente golpeadas por facturas de precio alto
de electricidad, facturas de agua y
ajustes fiscales y daño por caídas en
las ventas, han cerrado y continúan cerradas. Escuelas cerradas debido al deterioro o debido
a una decreciente cantidad de estudiantes. En esta capital típicamente de
convivencia, las comunidades han reforzado las puertas y colocado rejas para
ayudar a frustrar a los ladrones de autos y de hogares privados. Las drogas ilegales,
incluyendo narcotráfico de alto nivel, son una de las pocas industrias de crecimiento.
Puerto Rico, a unos 1.000 km de Miami, ha sido pobre. Su ingreso per cápita
es de alrededor $15,200, la mitad de Mississippi, el estado más pobre. Treinta
y siete por ciento de los hogares reciben cupones para alimentos; en
Mississippi, el total es de 22 por ciento. Pero la prolongada recesión ha
golpeado a la clase media más fuerte, según dicen los economistas, dijo García
Padilla. Los trabajos son todavía escasos, los beneficios de pensión para
algunos están disminuyendo y los presupuestos continúan apretados. Incluso
muchas personas con cheques han optado simplemente disfrutar de los beneficios
de su ciudadanía de Estados Unidos y lanzarse hacia una nueva vida en el
continente.
La población por territorio ha bajado en comparación con algunos estados
del continente. En 2011 y 2012, la población bajó casi un 1 por ciento, según
cifras del censo. Desde julio de 2012 a julio de 2013, declinó nuevamente por
el 1 por ciento, o cerca de 36,000 personas. Eso es más de siete veces que en
West Virginia, el estado con la mayor pérdida de población.
La falta de esperanza originada por los pasados gobiernos coloniales, junto
con una baja tasa de natalidad y las preocupaciones sobre cómo Puerto Rico va a
prosperar con un rápido envejecimiento de la población y una gran parte de los
residentes desempleados. De los 3.67 millones de personas en la isla, sólo 1
millón trabajan en la economía formal. La isla tiene una de las más bajas tasas
de participación laboral en el mundo, con sólo un 41.3% de edad laboral, puertorriqueños
en puestos de trabajo; uno de cada cuatro trabaja para el gobierno.
Por otro lado "Hoy en día, puertorriqueños con puestos de trabajo van
a los Estados Unidos," dijo Orlando Sotomayor, un economista de la
Universidad de Puerto Rico y el hermano de Alexis. "Incluso la gente en
sus 40s y 50s, profesores de la Universidad con seguridad en el empleo
completo, están viajando al continente en búsqueda de trabajo. El fenómeno no es
muy infrecuente ya que existe esperanza de que la nave pueda ser corregida.
"
El éxodo actual es casi similar con la década de 1950, cuando la escasez de
trabajo en la isla obligó a los agricultores y residentes rurales a viajar para
el continente para encontrar trabajo en fábricas en ciudades como Nueva York y
Boston. Es lo que hoy en día está pasando con, médicos, maestros, ingenieros,
enfermeras, profesores que dejan atrás a Puerto Rico. Casi todo el mundo en
Puerto Rico tiene un pariente que fue recientemente a la Florida, Nueva York,
Texas o Virginia, entre otros. Pero la decisión no es fácil. Padres dejan a los
niños. Casas son alquiladas o vendidas por una pérdida en un mercado saturado.
Las empresas deben cerrarse. Y el inglés debe ser pulido, o en algún caso
aprendido, a toda prisa.
El empresario puertorriqueño Alexis Sotomayor dijo que en su vuelo de enero
a Orlando, dos conocidos puertorriqueños que estaban en su vuelo a Orlando
viajaron con la esperanza de encontrar trabajo. "Se fueron en su vuelo de la
mañana y regresaron por noche a Puerto
Rico, después de una entrevista,", Sotomayor dijo además que después de
que Coca-Cola lo despidió en el año 2001, el señor Sotomayor comenzó a
experimentar con extractos de plantas de destilación. Encontró que podría hacer
jabones naturales y decidió entrar en el negocio por sí mismo, un movimiento
que le permitiría más tiempo para estar con sus hijos. El negocio creció por
años. Tanto es así que trasladó su negocio en el 2005 a un pequeño edificio que compró en San Juan.
Encontró que estaba ganando más dinero haciendo jabón que trabajando como
ingeniero químico. Luego en 2008, la recesión golpeó a su puerta. Durante cinco
años, ha intentado levantar su negocio; Él fue a varias ferias alrededor de la
isla, estableció puestos en centros comerciales, promovió su infusión de flor
de jabones, velas y lociones en la televisión. Dividió su tienda el año pasado y decidió alquilar la
mitad del edificio. Despidió a dos de
sus cuatro empleados.
Menciona Dennis Rivera en un
artículo para el New York Times. Que los gastos del negocio del señor Sotomayor
en Puerto Rico ascendían a $600 al mes en el pago de energía (más del
doble de lo que pagan los consumidores en el continente). El gasto excesivo de
electricidad es el resultado del monopolio ineficiente de funcionamiento del
gobierno de Puerto Rico. Al mismo tiempo se debe al sometimiento del 67 por
ciento del petróleo para la energía eléctrica. Además el año pasado, las
tarifas del agua aumentaron 60 por ciento en un intento del gobierno para
ayudar a reducir la deuda de la empresa estatal de agua.
Según el señor Sotomayor: El costo de la matrícula privada para sus hijos, aumento
un total de $2,000 al mes, ese es un gasto no negociable para él. Ya que la
clase media y la clase media alta de Puerto Rico, hace mucho tiempo perdió la
fe en las escuelas públicas de la isla. La inscripción de la escuela pública se
ha desplomado en los últimos años, en parte debido a la disminución de las
tasas de natalidad, pero también debido a la mala calidad de las escuelas. "Muchos
padres, incluso de la clase baja media, invierten todo su dinero en
una escuela privada para sus hijos, aunque a veces tienen que vivir en casas
alquiladas," dijo Nilsa Velázquez, profesora de economía en la Universidad
de Puerto Rico que planea trasladarse a Virginia con su familia este verano.
Para muchos, la alta tasa de crímenes violentos ha sido un factor
determinante de este éxodo para el continente. Hubo 1,136 asesinatos en 2011,
un registro mucho mayor que en el
continente. Bajó a 883 homicidios el año pasado, un punto de orgullo para el
gobernador. Pero el daño ya estaba hecho. Aquí la vida siempre ha estado llena
de compensaciones, incluyendo un alto costo de vida. Ahora, sin embargo, queda
poco al comercio. 'Vivir aquí para sobrevivir?' "Entre hacer menos dinero
y no saber cuándo alguien te asaltará, esto empuja la calidad de vida a una muy
baja," dijo Alexis Sotomayor. ¿" Vivir aquí sólo para sobrevivir? No,
gracias".
Para la señora Velázquez, la catedrática que vive en Mayagüez y su esposo,
que trabaja para la reserva de la fuerza aérea, los cálculos mentales fueron
similares. Ella es de 50, dijo. Lo último que quería hacer era renunciar a su
trabajo como profesora de economía, mover a sus dos hijos adolescentes y distanciar
a su madre de 76 años de edad, quien no habla a inglés y nunca ha salido de la
isla.
Pero ella está tan desilusionada con la Universidad de Puerto Rico Recinto
de Mayagüez (una de las joyas de las
corona del sistema de educación superior de la isla, donde ha trabajado durante
casi tres décadas) que ya no lo ve como una opción viable para sus hijos.
Frente a la continua tensión económica, la Universidad de Puerto Rico ha
sufrido la pérdida de un flujo constante de los profesores valorados y
financiación para proyectos de investigación importantes. Incluso titulares
profesores han abandonado, dijo la señora Velázquez.
"Lo más importante para mí es la educación de mis hijos, y la segunda
es mi calidad de vida," dijo la señora Velázquez. "Uno observa todos estos cargos
y los impuestos subiendo, pero las calles siguen terribles". Este verano
tratará de alquilar su casa en lugar de vender y tener una pérdida, y se moverá
al Condado de Fairfax, Virginia, donde su marido trabajará para el gobierno
federal y sus hijos asistirán a una escuela pública superior. Como economista
con una licenciatura en derecho, ella es la esperanza de encontrar algún tipo
de trabajo. "Pensé que podía hacer algo en Puerto Rico", dijo.
"Ahora se ha ido".
Las frustraciones del señor Sotomayor y la señora Velázquez son un ejemplo
de la profundidad de los problemas
económicos de la isla. Los orígenes de la crisis, sin embargo, se extienden
atrás más de una década. Incentivos fiscales han sido una atracción para las
empresas del continente que buscan hacer negocios en Puerto Rico y la isla se ha
beneficiado a su vez por su capacidad de ofrecer tales incentivos. Esta
estrategia económica se rompió, en gran parte, estructurando su economía
alrededor de ellos y no buscando otras estrategias económicas alternas. Estos
incentivos no fueron contralados por el gobierno colonial local sino por el
continente ya que el continente veía a estos incentivos como un tipo de
mantengo que afectaba la economía de empleos del continente.
Las leyes de impuestos una vez fueron abundantemente generosas, que
alimentaron la propagación de las
fábricas textiles y productos farmacéuticos, entre otras cosas. Esto se vino abajo
en el 2006, después de la eliminación de 10 años de un subsidio que recibían las
empresas estadounidenses que operaban en Puerto Rico con ingresos libres de
impuestos. Cambios en la economía global y la recesión mundial agravaron la
situación. Desde 1996, los trabajos de fábrica en la isla bajaron de 160,000 a
75.000.
Poco se hizo para tratar de renovar el marco económico de la isla. En
cambio, los déficits subieron y las pensiones giraban fuera de control. En
2006, el gobierno cerró por dos semanas porque carecía de dinero para cubrir los
gastos. El gobierno decidió aumentar los impuestos. En 2010, el gobernador
(PNP) redujo impuestos y despidió a 33,000 trabajadores gubernamentales. Pero
los gobernadores de Puerto Rico comenzaron a endeudarse más fuertemente para salir del atolladero económico. "Era barato y fácil de pedir
prestado," dijo Mike Soto, el Presidente del Centro de Puerto Rico para
una nueva economía. "Llegó al punto donde nos preocupaba que nos prestaran".
Bajo presión el gobernador Alejandro García Padilla ha tomado medidas para
arreglar la economía maltrecha, como reequilibrar las pensiones y el aumento de
los impuestos. (Tomado del Artículo de Dennis Rivera para el New York Times).
El año pasado, el Sr. García Padilla, el primer gobernador del campo (“Country
Side”), asumió el control. Con la economía tambaleante de la isla y agencias de
crédito amenazando un “down grade” al estado de chatarra, no tuvo más remedio
que tomar una acción rápida.
Los economistas le han dado crédito por actuar para remediar los problemas
que han empeorado progresivamente durante décadas. En un año, se trato a
reacondicionar tres programas de pensiones, incluyendo las pensiones de los maestros, que están en un ritmo que se pueden quedar
sin dinero pronto. Dos de ellos están aún pendientes de aprobación final del
juez. Redujo el déficit en un 70 por ciento. Y tiene las cuatro principales
compañías de funcionamiento del gobierno endeudadas, insistiendo en mayor transparencia.
El Gobernador García Padilla se comprometió a no despedir más trabajadores del gobierno y se
movió agresivamente a promover
incentivos para atraer a los inversionistas ricos, como el fondo
multimillonario John Paulson, quien ha invertido en una exclusiva playa resort
y en un complejo de condominio. Una serie de negocios han dejado la isla,
asustados por la crisis económica de la isla y el alto costo de la
electricidad. Pero otros han llegado o ampliado, como Eli Lilly, Seaborne
Airlines y Cooper Vision.
Cuatro días antes, el Gobernador García Padilla anunció que presentaría un
presupuesto equilibrado para el próximo año (2014-2015), un año antes de su
propio tiempo. Siendo su trabajo más difícil. Los analistas dijeron que la
bajada del crédito haría más difícil mejorar la economía. El gobernador ordenó
a las agencias a reducir los presupuestos en 2 por ciento."He hecho todo
que lo posible para evitar una rebaja", El Gobernador García Padilla dijo
en una entrevista, llamando el movimiento "injusto". "Tal vez
ahora no puedo detener los vientos, pero puedo construir los molinos de viento.
Yo soy un optimista incurable".
Pero no todo el mundo está aplaudiendo. Sus aumentos de impuestos han
afectado negativamente a algunas empresas, que podrían resultar en una carga
adicional para la economía. Entre los muchos impuestos que puso en marcha, el gobernador
planteó la tasa del impuesto sobre sociedades a un máximo de 39 por ciento. El
año pasado, la economía continuó en una baja según el Comisionado Residente sin
Representación en el Continente. "La nueva administración tiene una
mentalidad de contabilidad en contraposición a una mentalidad de desarrollo
económico," dijo Pedro Pierluisi, el representante no votante de Puerto
Rico en el Congreso y un opositor político del gobernador. "Aquí encontrará
Puerto Rico con un problema económico que afecta económicamente a las
corporaciones leales a Puerto Rico (sus creadores de trabajo) un 39 por ciento.
¡ Hola!" En nota del editor y traductor del escrito: “Lo que no dijo el
Comisionado es que su partido es uno de los causantes de la crisis económica y
social que vivimos. Su partido despidió alrededor de 33,000 empleados
gubernamentales en la pasada administración y elimino las 936 (en
administraciones pasadas) que eran la base económica del antiguo sistema
económico colonial. Además este partido (PNP) continuó la tradición de los gobernadores
salientes de no informar correctamente la situación económica de Puerto Rico al
Gobernador entrante”.
Tal vez el más malmirado es el nuevo impuesto de ingresos brutos lucrativo,
que algunos propietarios de pequeñas y medianas empresas dicen que amenaza con
poner fuera del negocio. Debido a la forma en que está estructurado el
impuesto, que afecta a las empresas con menos de un margen de beneficio neto de
5 por ciento. Esto significa que muchas empresas relacionadas con los
alimentos, como supermercados y nuevos negocios, se ven más afectados cuanto
menor sea el margen, mayor será el impuesto.
Algunas tiendas están pagando una tasa impositiva efectiva del 130 por
ciento, dijo Manuel Alfonso Reyes, Vicepresidente de una asociación comercial
que representa a la industria alimentaria. Si el impuesto no es revisado,
algunos se verán obligados a cerrar y otros tendrán que subir los precios.
"Es absurdo," dijo el Sr. Reyes Alfonso. "Es como vender el
coche para comprar gasolina".
En
respuesta, el Gobernador García Padilla está
formando un Comité para echar un segundo vistazo a los nuevos impuestos. Las
exenciones al impuesto están disponibles, pero el Sr. Reyes Alfonso dijo que
eran difíciles de obtener. Mientras tomaba café en la sección de panadería de
una de sus tiendas, José Revuelta, el Presidente de supermercados Super Max en
Puerto Rico, dijo que se las arregló para ampliar durante la recesión. Pero
ahora, con los ingresos brutos y corte de impuestos corporativos en su negocio,
se está guardando en bonos, aumentos salariales y las inversiones de capital.
Me dijo que el alza de los impuestos sería temporal."Puedo entender que esto
se realizará a corto plazo,"dijo. "Pero es necesario que haya un
plan".
No
muchos están seguros de que existe un plan a largo plazo para levantar la isla
de un accidente tan sostenido. Pero no puede ser mucho peor, dicen. "A
veces tienes que llegar al fondo para restaurar," dijo el señor Soto, del
centro para una nueva economía. "Yo espero que eso es lo que va a pasar".
Final del artículo escrito por la periodista Lizatte Álvarez y el periodista Dennis Rivera ambos del New York Times (Artículo editado y traducido).
A
continuación notas del
editor y traductor del escrito: Lo
mencionado en este artículo son los resultados de la mala administración de los
gobiernos coloniales de nuestro Puerto Rico y un sabotaje a nuestro Puerto Rico
por fuerzas locales y del continente
para crear una crisis económica y social en contra de nuestro destino como
Pueblo. La crisis económica y social está establecida porque Wallstreet (Bancos
y Casas de Corretajes) lo han creado como lo creo en el continente. Otorgando
prestamos fatulos y margen de créditos sin capacidad de pago. Y posiblemente se
debe además a esquemas fraudulentos de otras entidades e individuos que les conviene
que Puerto Rico viva un estado de anarquía de crisis económica y social con el propósito
de lucrarse económicamente y mantener un status que puedan controlar. Si Puerto
Rico tiene una Crisis Económica y Social posiblemente se debe principalmente a
los que otorgaron las inversiones para Puerto Rico por qué no velaron los intereses
de los inversionistas y además no velaron que existiera una capacidad de pago adecuada
por parte de Puerto Rico. Esta situación ocurrió en el continente en cuanto al
mercado de hipotecas que se aprobaron hipotecas con documentos e información
falsa.
Nosotros
somos parte del continente si el continente tiene una crisis entonces nosotros
la tendremos también esos son las errores principales del colonialismo. Si
Puerto Rico tiene una crisis económica y social el deber del continente es ayudar
a Puerto Rico ya que si somos una colonia sin los parámetros de una soberanía o
estadidad el deber y la responsabilidad ante la comunidad internacional es ser
socio en la solución de la crisis. Cuando el continente nos pide una ayuda para
defender su política exterior nosotros cumplimos con dicho compromiso sin pedir
ningún beneficio y de igual manera el continente debe de cumplir dicho
compromiso. Existen precedentes en el
continente de estas ayudas y debemos
recordar al continente que existen más puertorriqueños que viven hoy que votan
y tienen un poder político igual que algunos de sus ciudadanos. Debo aclarar que
insultar las raíces de un gobernante que representa a un pueblo no es la libre
expresión y tampoco la libertad de prensa sino el fascismo y racismo en contra
de un pueblo y sus orígenes latinos.
El
tratar de mejorar la economía con impuestos sobre las ventas (IVU) no es la
solución. La solución puede ser eliminar el IVU y regresar al impuesto sobre la
mercancía que entra a Puerto Rico (6%) ya que nosotros somos una Isla y la fiscalización
de este impuesto sería menos costosa y además generaría más ingresos para el Gobierno.
Por otro lado la actual crisis fiscal y social no es razón para no pedir un
cambio a nuestra situación colonial sino lo contrario sería una mejora a
nuestras relaciones con el continente.
Originalmente
los productos que entraban a Puerto Rico, pagaban por lo regular un 6% de
arbitrios, en los puertos. Creo que el arbitrio para las cervezas, el ron, y
otros artículos era algo mayor. Con el Impuesto sobre Ventas
y Uso, se pretendía que: los
comerciantes bajaran un 6% el precio original de sus productos y las compañías que no pagan un 6% en los
puertos (con trucos) tuvieran ahora que tributar. Lo que los impulsores del
IVU no pensaron es en que: El capitalismo te dice que los comerciantes no
le van a bajar un 6% a sus productos. Que sí el departamento de hacienda, no
tiene personal para fiscalizar a un grupo reducido de compañías importadoras,
menos tendrá personal para fiscalizar a todos los comerciantes de Puerto Rico.
En fin el IVU es todo un desastre para la economía de Puerto Rico. El precio de
todos los productos está subiendo de manera acelerada (con inflación). Los
puertorriqueños en vez de pagar un IVU de 7%, hoy en día pagan un 13 %. La
buena solución hubiera sido que se pagara el arbitrio de los puertos 6%, y se
implantará un IVU de un 3%. Un 1.5 % para el municipio, un 1.5% para el estado.
Por otro lado tomar la decisión de eliminar
el IVU totalmente y regresar al árbitro del
6% que se estableció originalmente. Le recordamos
que pueden visitar nuestra página electrónica WWW.NOTICIASILLESCANOS.COM para
más información o videos de este tema y otras actividades.
Por
Ramón Luis Vázquez Collazo de la Prensa Independiente y Otros Servicios